jueves, 4 de septiembre de 2014

CAYENDO COMO UN PÁJARO


CAYENDO COMO UN PÁJARO

A Gustavo Cerati



Gustavo,

la muerte viene como el sueño,

como un silencio vertical que intenta la lluvia

y apenas puede

mojar unas pocas palabras.

Con esto te quiero decir que la muerte viene

cuando nadie la llama

o cuando alguien la llama demasiado

(cuando alguien se cansa

de la piel como límite

y se extirpa la memoria,

y se desata la costumbre del hambre).



Gustavo,

la muerte parece decir que basta, pero no;

parece querer que nos duela hasta el aire, pero no.

Es un espejo que nos mira

desde la infancia

pero se quiebra

(te juro que se quiebra)

cuando cerramos los ojos

y debajo de los párpados

nuestras pupilas crecen hasta convertirse en animales traslúcidos

(y esos animales prometen que no se van,

que se quedan, en la voz o en las flores).



Vos seguís cayendo como un pájaro,

un solitario pájaro en el viento.

Sos un destello que aterriza limpiamente en mi cabeza.

 Yo tengo diecisiete años

y de mi cuerpo brotan soles,

milagros.


 


Fotografías: Gustavo Cerati, Alejandro Kuropatwa 




4 comentarios:

  1. Quedé tocada por la muerte de una chica, menos que yo cuatro o cinco años...apenas tenía yo once años, y ella Conchi murió de meningitis... En pocas horas nos quedamos sin ella... Su casa era la casa donde todas y todos los chicos de la calle íbamos a ver la primera TV... Su padre fue trabajador en Suiza, ganó bien el dinero y volvió con una TV... Aquello fue una conmoción para todos... nos sentábamos en la puerta esperando que su padre Eloy no abriese y dejase pasar a ver aquellos programas o pelis americanas... Conchi era una niña grande, morena con inmensas trenzas, parecía más una mexicana que una española...simpática y alegre, la única niña de sus padres... aquella muerte nunca fue superada por ellos, ni tampoco por mí... Eloy cada vez que me ve, se abraza a mí... nos reímos y sabemos que Conchi también ríe con nosotros dos. Gracias Raquel.

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    1. Algo queda, Carmen querida, en la voz o en las flores. Y a eso nos abrazamos!

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  2. Mucha emoción lo que escribió Carmen...
    Algo queda, Raquelita. Agarrate de las lindas cosas, por favor.

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